En el contexto de la EM, la toma de decisiones informadas & compartidas entre neurólogo/a y su paciente es especialmente importante por su variabilidad en los síntomas y el curso clínico y porque existen múltiples opciones terapéuticas1.
La toma de decisiones compartidas, donde los pacientes participan activamente, ha demostrado múltiples beneficios como la adherencia al tratamiento, aumentar la satisfacción y mejorar la calidad de vida2. Pero existen áreas de mejora en la comunicación y colaboración médico-paciente.